La mujer en el mundo de la guitarra flamenca

Hay veces que parece que la historia ha sido escrita por hombres. Si te pones a investigar acerca de guitarristas flamencos, encontrarás un sinfín de nombres, la inmensa mayoría hombres. En este punto nos podemos preguntar, ¿acaso no hay mujeres que se han dedicado a la guitarra en el flamenco? 

Lo cierto es que sí hay mujeres que forman parte de la historia de la evolución de la guitarra flamenca, pero han sido invisibilizadas. En el pasado a las mujeres se les prohibía subir al escenario, pero su rebeldía y ganas de demostrar su arte no se lo impidieron. Desde las primeras etapas del flamenco las mujeres estaban presentes, aunque era desde el anonimato. 

Poco a poco las mujeres fueron haciéndose un hueco como cantaoras y bailaoras, llegando a convertirse en eminencias dentro del flamenco, como nuestra faraona Lola Flores, La Niña de los Peines o Carmen Amaya, aunque aquí te dejamos un artículo donde puedes descubrir a más mujeres que hicieron historia en el mundo del flamenco. 

Entonces, ¿qué ocurre con las guitarritas flamencas? Desde el Teatro Flamenco Sevilla te dejamos una lista con algunas de las más destacadas. 

Adela Cubas

La fecha del nacimiento de Adela Cubas se desconoce, al igual que su lugar de procedencia, pero desde niña se enamoró de la música. Su familia no tenía muchos recursos y el único instrumento que tenía a su alcance era la guitarra. Aún así, tuvo que aprender ella sola y a escondidas, pues no era bien visto que una mujer tocase este instrumento, pero eso no le impidió seguir su vocación. 

Trinidad Huertas, La Cuenca

La bailaora y guitarrista Trinidad Huertas, más conocida como La Cuenca, comienza su andadura artística en los cafés cantantes de Málaga. Su debut fue en 1875 en Almería, y le permitió adentrarse de lleno en el mundo del flamenco, recorriendo los diferentes cafés cantantes del país con su guitarra bajo el brazo.

De su faceta como guitarrista apenas hay registros, pero destaca su profesionalidad como bailaora e intérprete de malagueñas. Fernando El de Triana le dedica unas líneas en su libro Arte y artistas flamencos: “El baile de hombre lo ejecutaba maravillosamente; fue la primera lumbrera como mujer vestida de hombre, con traje corto; y por si esto no fuera bastante, también fue una excelente guitarrista”.

Josefa Moreno, La Antequera

Josefa Moreno, La Antequera nació en la localidad malagueña de Antequera en 1889. Comenzó a interesarse por el arte del flamenco a muy corta edad, cantando y acompañándose a sí misma por la guitarra, algo no muy común por aquella fecha. 

Debutó profesionalmente en Jerez de la Frontera a la edad de catorce años. Tras los éxitos cosechados en Melilla y Tánger, trabajó durante unos años en los cafés cantantes de Málaga y Madrid. Nueva York, La Habana y México también fueron testigos de su arte. En 1917 regresó a la capital de España, donde pasó el resto de su vida, pero ya convertida en una gran estrella. 

Teresita España

Discípula de la bailaora Juana La Macarrona, Teresita España fue guitarrista, cantaora y bailaora nacida en Sevilla en el siglo XIX-XX. Las últimas referencias sobre sus actuaciones se remontan a mediados de los años treinta. A partir de ahí no se tienen nuevos datos de sus posibles actuaciones hasta su reaparición en los años sesenta en una gala en Sevilla. 

Otra sevillana ausente mucho tiempo, 

Teresa España interpretó milongas y guajiras, 

acompañándose magistralmente con la guitarra

Sin duda, la historia del flamenco no se hubiese escrito igual sin la presencia de las mujeres, aunque en algunas facetas del flamenco, como es en el toque, apenas son recordadas. Desde el Teatro Flamenco Sevilla hacemos un homenaje a estas grandes profesionales que han contribuido a forjar la grandeza del flamenco con cada uno de sus acordes. Y si quieres disfrutar de muchos acordes y rasgueos más, puedes consultar los próximos espectáculos en nuestra página web.