¿Conoces el origen de los tablaos flamencos?

El flamenco es un arte con una historia muy longeva. Por ello, podemos llegar a pensar que los tablaos flamencos llevan presentes en nuestra cultura desde sus inicios. Pero lo cierto es que su origen es relativamente reciente. ¡Desde el Teatro Flamenco Sevilla te lo contamos!

Café cantante: el antecedente del tablao flamenco 

Los cafés cantantes o catedrales del duende fueron unos locales nocturnos dedicados al ocio y entretenimiento de la población a través de espectáculos flamencos mientras los presentes disfrutaban acompañados de copas. Los primeros cafés cantantes surgen a mediados del siglo XIX principalmente en Cádiz, Sevilla y Madrid. 

Estos cafés eran lugares de reunión y fueron los primeros espacios en los que se ofrecían espectáculos flamencos abiertos al público, ya que hasta ese momento el flamenco estaba restringido a celebraciones familiares, o a actuaciones improvisadas en tabernas y locales de la época.

Generalmente estaban conformados por un amplio salón, decorado con sillas y mesas donde el público disfrutaba de la actuación y de la bebida. Había un espacio reservado en el centro de la sala donde se ubicaba un tablao para que los artistas pudieran llevar a cabo su actuación. 

Los cafés cantantes se caracterizaban por la alta competitividad que había entre los artistas, y sirvieron de trampolín para muchos de ellos, llegando a lo más alto dentro del mundo flamenco, como Don Antonio Chacón, Manuel Vallejo o La Macarrona. 

A partir de 1920 comienza la decadencia de los cafés cantantes hasta llegar a su desaparición, dando paso a otros negocios como el cine. Gracias a la evolución de estos cafés se da el nacimiento de lo que conocemos hoy en día como tablao flamenco, convirtiéndose en la cúspide de los espectáculos flamencos y un gran reclamo para los artistas. 

Durante la década de los 60 los tablaos flamencos ya eran un icono de la cultura de nuestro país, siendo la principal atracción turística tanto de forma nacional como internacional. Pero no solo eso. Estos locales también eran frecuentados por figuras políticas y estrellas de Hollywood que se quedaban atónitos ante un arte tan singular como es el flamenco. En esta época es cuando el flamenco adquiere el reconocimiento internacional que se merece y se convierte en un arte universal, con Andalucía como principal región de referencia.

¿Cómo son los tablaos flamencos?

Los tablaos flamencos son un lugar para la juerga y disfrutar del buen arte. Se les llama ‘tablaos’, porque la tarima sobre la que actúan los artistas es de madera, un material que ofrece un sonido idóneo para el zapateao y, además, ayuda a proteger las articulaciones de los bailaores.

La estética y ambiente que se recrea es similar al de su antecesor, las catedrales del duende. El objetivo es que los asistentes puedan disfrutar al máximo de cada actuación y artistas. Por ello, el ambiente suele ser acogedor y de intimidad para conseguir una conexión directa y pura entre los sentimientos de los artistas y el público. 

La acústica es lo más importante, pues debe ser la idónea para conseguir un sonido de calidad, limpio y potente, y escuchar de forma nítida el taconeo de los bailaores, los quejíos y el toque de la guitarra. 

Sin duda, para poder disfrutar de un buen espectáculo flamenco es necesario acudir a un tablao flamenco y vivir la experiencia de forma plena y real. Nuestro Teatro Flamenco Sevilla, situado en el centro histórico de la ciudad, es un lugar idóneo para recuperar la tradición de los antiguos tablaos. Si no te quieres perder esta oportunidad, reserva tus entradas en nuestra página web. ¡Nos vemos pronto!